lunes, 26 de enero de 2009

Los Tradescants




"Los Tradescant
John Tradescant el Viejo (ca. 1570-1638) y John Tradescant el Joven (1608-1662)

Fueron jardineros de la monarquía, coleccionistas de curiosidades, viajeros e importadores de plantas exóticas. Los Tradescants están enterrados en el cementerio de la iglesia de St. Mary-at-Lambeth que ahora es el Museo de la Historia de la Jardinería, junto con los otros miembros de la familia. El jardín principal del museo tiene el estilo de los tiempos de los Tradescants.

Ser 'curioso' era un cumplido en los tiempos isabelinos/jacobeos y ambos Tradescants se hicieron famosos por la jardinería, el diseño, los viajes y por su colección de curiosidades. El epifafio de sus tumbas describe muy bien por qué se hicieron tan conocidos y el interés que hay hoy en sus actividades. Se puede leer en sus tumbas en el museo.

John Tradescant el Viejo viajó después del año 1609 tras entrar al servicio de Robert Cecil, que se convirtió en el primer duque de Salisbury. Visitó Europa para traer plantas y árboles incluyendo rosas, fritillarias y moras a los jardines de Hartfield. Después, al servicio de Sir Edward Norton, Tradescant llevó a cabo una misión diplomática a Rusia y también visitó Argelia, tomando siempre notas sobre botánica y plantas. Hacia 1620 Tradescant había alcanzado una posición preeminente como director de jardines y cuyo consejo fue tomado por los más altos.

En 1626 Tradescant alquiló una casa en Lambeth donde creó su propio jardín y un gabinete de curiosidades donde mostró "todas las cosas extrañas y raras" que había traído de sus viajes. El original está en el Ashmolean y una copia se muestra en el museo. La casa de Tradescant fue llamada "The Ark" y fue un sitio esencial para ver en el Londres del momento lo más conocido sobre el mundo y las diferentes culturas. Fue el primer museo de su tipo en Gran Bretaña que fue abierto al público, costando 6d la entrada.

John Tradescant el Joven viajó inclusó más lejos que su padre, visitando Virginia tres veces. Introdujo el tulipero y la planta de yuca y también incrementó la colección de The Ark con artefactos provenientes de América - incluyendo el manto de Powhattan, el padre de Pocahontas. El joven John Tradescant también sucedió a su padre como jardinero real.

Por sugerencia de Elias Ashmole comenzó el catálogo de la colección del Ark y el Musaeum Tradescantianum de 1656 fue el primer catálogo de museo que se publicó. Tradescant quiso que la colección fuera a parar a su viuda a su muerte pero Elias Ashmole obtuvo la colección por cesión y estableció el Ashmolean Museum de Oxford con la colección. Muchos de sus elementos originales pueden verse todavía en ese museo y Ashmole está también enterrado en el Museum of Garden History. La tumba de los Tradescant está junto al núcleo del jardin cerca del Capitán Bligh del Bounty, y está cubierta de tallas que representan sus intereses en la vida que los caracterizan como hombres curiosos."

Del Museum of Garden History

domingo, 25 de enero de 2009

La Wunderkammer de Giampaolo di Cocco



La “Wunderkammer” di Giampaolo di Cocco a Palazzo Chianini-Vincenzi

"Dal 24 gennaio al 21 febbraio, organizzata dall’assessorato alla cultura del Comune di Arezzo e curata da Matilde Puleo, a Palazzo Chianini-Vincenzi di Via Cesalpino 15 si terrà la prima mostra del 2009 frutto della collaborazione fra l’amministrazione comunale e il centro d’arte contemporanea Mega+Mega: una personale dell’artista Giampaolo di Cocco dal titolo “Wunderkammer”.
Inaugurazione sabato 24 gennaio alle 18. “Un modo per riprendere un percorso dopo una pausa di due mesi - ha dichiarato l’assessore alla cultura del Comune di Arezzo Camillo Brezzi - restituire all’arte uno spazio importante della città e chiudere idealmente il 2008 anche se siamo già nel 2009, un anno nel quale proporremo assieme a Mega+Mega un nuovo progetto di valorizzazione di forme artistiche sperimentali”.
Ospite, questa volta, l’architetto fiorentino Giampaolo di Cocco, conosciuto e apprezzato sia in Italia che all’estero: Colonia e New York sono attualmente i due centri dove l’artista sta realizzando importanti progetti espositivi. Nel corso della sua carriera ha inoltre lavorato con Pierre Restany, Lara Vinca Masini, Giorgio di Genova, Gillo Dorfles, Bruno Corà, Omar Calabrese.
“Wunderkammer - sottolinea Matilde Puleo - è un appuntamento con un protagonista dell’arte contemporanea che presenta opere di grande efficacia e forte impatto visivo. Sono ambientazioni di grandi dimensioni, relitti e reperti del quotidiano, esperimenti particolari. Si va dai grandi animali narranti, alla serie dal titolo ‘Cineplatonica’, la ricostruzione fantastica dell’antico mito della caverna, alle mirabolanti situazioni di equilibrio instabile determinate dagli oggetti d’uso abituale: produzioni di periodi diversi di cui viene offerta una lettura unitaria e coerente. In questo complesso narrativo dal carattere metaforico, tema protagonista è la morte: se la ‘Wunderkammer’, tradizionalmente intesa come ‘camera delle meraviglie’, fin dai suoi esordi secenteschi era un modo per esprimere positività nei confronti dell’insolito, la sintesi fra movimento, forma e sonoro di Giampaolo di Cocco è rappresentata dagli ultimi rantoli di animali in procinto di spirare”.
“Ma non è tanto una morte che genera terrore o vissuta in maniera scaramantica – ha concluso l’artista – è una morte che recupera il suo significato di termine ultimo del nostro destino. Siamo circondati da una cultura ‘del primo della classe’ che trovo sbagliata mentre se riuscissimo a soffermarci di più sulla contemplazione della morte, alla maniera di D’Annunzio che la definiva ‘gaia’, faremmo dei grandi progressi in direzione della vera conoscenza che non è certo quella propagandata dallo sport e tanto meno dal cristianesimo”.

MERCOLEDì 21 GENNAIO 2009 13:06 - Comune di Arezzo Servizio Comunicazione
http://www.arezzonotizie.it

El Calculum de Beltrán



"Unas uñas de Rasputin, que no se avergüenza haber sustraído en una exposición en Londres ('había muchas', se disculpa), le sirven para hablar de reliquias e iconos terrenales, mientras que la reproducción perfecta de un sello de Nueva Zelanda, que por un error de imprenta se convirtió en una rareza muy codiciada y cotizada, le permite reflexionar sobre qué hace que algo adquiera o pierda valor, independientemente de su valía intrínseca.
Aunque Beltrán no oculta su fascinación por 'los sistemas de clasificación y las estructuras que crean sentido, como diagramas, bibliotecas o colecciones', más que un archivo, la serie Calculum se parece a una wunderkammer, aquellos cuartos de moda en el siglo XVII, donde aristócratas, viajeros y excéntricos reunían especímenes de países exóticos, obras de arte y hallazgos de interés histórico o científico, con el único fin de asombrar."

Roberta Bosco, "Como un virus reflexivo y creador: el arte subversivo del mexicano Erick Beltrán se expone en Barcelona", El País, 25 de enero de 2009.

viernes, 23 de enero de 2009

La Wunderkammer de mi abuelo... y la de von Schutz


"Recuerda por un momento la Wunderkammer de mi abuelo, sus salitas llenas de objetos fantásticos y curiosos, que tanto nos fascinaban cuando le visitábamos de pequeños; ahora imagina estancias diez veces más grandes que aquellas, y cien veces más objetos por cada estantería, y mil por cada pared, y así sala tras sala, y aún piso tras piso, sin que en todo ello aciertes a encontrar una sola pieza que no te maraville más que la anterior, sea por su naturaleza, valor o procedencia. Y por ello se explica en verdad este nombre, cámara de maravillas, pues prodigioso es que un hombre sea capaz de encerrar el universo entre paredes y armarios, a la manera al menos en que von Schutz lo ha hecho en esta Casa"

Luis Mª Carrero Blanco, La cámara de las maravillas (1997)

sábado, 10 de enero de 2009

Duerme la ciudad


Entre estratos desvencijados
duerme la ciudad
mientras, el pasado reposa
en un gran cementerio
de aparente caos

lunes, 5 de enero de 2009

El desván de los Reyes Magos




He aquí dos colecciones de juguetes antiguos. Por un lado la del asturiano José Antonio Quiroga, con más de mil piezas, probablemente la más importante de un coleccionista privado español, que ha sido objeto de diversas exposiciones como la que puede verse estos días en Langreo, Asturias.

Por otro lado, la de Santiago Valdayo, que actualmente está expuesta en la Casa de la Cultura de Bollullos (Huelva), bajo el sugerente título El desván de los Reyes Magos.

Ambas tienen piezas valiosas del siglo XIX. Para más información:
Quiroga / Valdayo

sábado, 3 de enero de 2009

De cómo el Herr Profesor Wunderk cuenta su vida


Nací en Schwarzwald hace unos cuantos años. Mi abuelo era un diplomático gran aficionado a la pintura. Sabedor de que había herederado su afición a menudo me relataba sus viajes por Europa y todas aquellas anécdotas que habían ido pincelando el vasto e interesante cuadro de su vida. Entre ellas mi favorita era aquella en la que me narraba sus visitas nocturnas al Musée Napoleon de París. Su encuentro con el Laocoonte fue un momento memorable que impregnó para siempre su retina.



Si a alguien le debió aquella experiencia fue precisamente a Dominique-Vivant-Denon, el director de los museos franceses, al que había conocido en Nápoles en su temprana juventud, poco antes del estallido de la revolución, gracias al embajador británico, Lord Hamilton. Esa amistad se mantuvo a lo largo de sus vidas, a pesar de los días de sangre y exaltación, a pesar de la guerra contra las tropas de Napoleón. Mantuvieron una abundante correspondencia hasta el final de sus vidas, donde el tema principal giraba siempre en torno al arte y a las antigüedades. El abuelo estaba enamorado de la ciudad del Vesubio y allí volvió muchas veces a lo largo del tiempo. Allí fue donde conoció a mi abuela, su segunda esposa, por lo que por mis venas corre sangre mediterránea.



Mi padre no tuvo mayor interés por el coleccionismo. Así que, como habrán podido deducir por todo lo escrito hasta ahora, fue mi abuelo el que me contagió su pasión. Lo que más me fascinaba de su rica colección era las curiosidades y maravillas que ya el abuelo de mi abuelo había arrinconado mucho tiempo atrás en los momentos en los que las colecciones se clasificaban con criterios más racionales y científicos.


Para mí fue todo un descubrimiento y mi abuelo me hablaba sobre las propiedades mágicas que ya desde tiempos inmemoriales tenían algunos de esos objetos fantásticos. Yo era un niño cuando él murió tras una longeva e intensa vida. Pero todos aquellos relatos no me abandonaron jamás.



Me propuse desde mi juventud la catalogación minuciosa de los curiosos tesoros heredados y su aumento constante, algo que con paciencia voy consiguiendo con el tiempo. He tenido la suerte de contar con mi amada esposa que nunca se ha sentido incómoda con mis excentricidades, antes bien, siempre ha sido un constante apoyo y su ayuda es fundamental para mí. La búsqueda de este tipo de colecciones la compagino con mis clases en la universidad aunque, evidentemente, si hay algo que me hace dichoso en este mundo es encerrarme en mi particular museo y disfrutar de mis ricas y variadas maravillas.

Denon Wunderk (1863)

viernes, 2 de enero de 2009

La Wunderkammer de la Sirenita



Una sirenita pelirroja en una lente de plata en la Wunderkammer de Tartx y la Wunderkammer repleta de curiosidades de la sirenita pelirroja de Disney.